0443 by IrinaJoanne |
Pues que al
salir de Capa me iba a una peda y como no podía tomar pues mejor me iba
temprano. Que al salir hasta tenía un bocho, viejito y bonito. Allí todos eran
bugas, allí conocí a Marco, un chaquilla medio jotito. Nos gustábamos mucho y
que si lo hacíamos ¡y va! Subíamos a un puente y nos mañoseábamos a gusto,
luego que siempre no. Volvíamos a mi casa y allí me besaba y me confesaba que
estaba empanochado. ¡Vaya suerte! Pero de nuevo me besaba. También tenía la marca de. Caín. Y que tiempo después, una tarde, Marco venía a buscarme, me lo topaba en
la calle y me besaba tomándome entre sus brazos, me cargaba y me decía que me
amaba. Y yo lo besaba con locura y dejaba todo para irme de aventura a su lado:
mi casa, mi familia, mi novio. Me iba con Marco y su amigo buga. Nos íbamos en
mi bocho hasta Matehuas, aunque yo no sabía conducir, por pendejo. El bocho no
frenaba o yo no entendía cómo subir puentes o virar hacia la izquierda en plena
carretera. Por eso Marco me besaba y yo me aferraba con deseo y seguridad a él,
acariciándole el alma y el palo, enamorándome cada vez más. Él conducía y todo
tranquilo, todo constante, la carretera, el buga consultando un mapa y fumando
mota. Marco se regresaba para la de Matehuas porque yo me andaba yendo por la
de Valles. Pero él me consolaba con sus besos y yo ya quería llegar al hotel
para hacer el amor. Y que cuando me tomaba de la mano el auto se caía en picada
por un barranco, pero no moríamos: estábamos caminando, burlando las ramas y no
sé qué madres. Él me besaba y yo lo besaba.
Entonces
abrí los ojos. Eran las 9:00, tocaba la TARGA. Pinches sueños, pinche Truavada,
pinche Kaletra.
Pinche
Marco, cómo besabas.
Qué bonito. Si no te molesta, lo comparto: http://letraerotika.blogspot.mx/2015/12/un-sueno-vivido.html
ResponderEliminarSaludos.