jueves, 17 de septiembre de 2009

Putas en serie

Foto: I fall when you scream bang, by cocobebe

Ema:

Labio granate en filigrana dulzona
con sudor y mordiscos colapsados.
Pozo de cimientos en barro y saliva
tan sólo esencias de pitonisa salvaje.
Doble oquedad para filisteos violentos
triple distancia para patricios en tiempos bastardos.
$7, 500 la hora
$14,000 la noche entera


Marta Ana:

Autómata diseñada en la persiana de un
inventor fabulista y sucesor del pantano.
De tetas con su propia vagina
y vaginas con su clítoris endemoniado.
Dicen que ligera.
¿Será?
$13, 000 la hora
$13,50 el minuto


La Loba:

Remedo incorregible
y sabidilla madura con rienda extravagante.
Que te come, que te gime, que te ordena
y tú que le besas el tacón sin costuras.
Y tú que tú, esclavo de un romance
en cien años de óxido, hueso poroso y melancolía hormonal.
$7, 500 la hora
$7, 501 si amamanta al niño


Evita:

Si tan sólo pudieras oír su voz
siempre querrías drenarte en la manzana
del paraíso, serpentearte en su pezón disoluto
y expulsarte en la cintura melancólica
con la máscara utópica donde se dan encuentros indebidos.
Como su voz.
$2, 500 la diferencia de años
$18, 000 la idealización


Joaquín:

En reparaciones.
$


Leonor:

No otra vez apariencia y gusanos
en el temporal donde se dieron los duraznos
del diablo, allí ocurrieron emanaciones de aurora
impía, cegadora, en desgarre de hierros
y disolución espasmódica sin pronunciaciones
sexuales de pantano.
Tan de cinturita vaporosa, como el lienzo
inverosímil donde se ha plasmado su indispuesta
naturaleza de mujer fantasma.
$500, 00 un viaje al más allá
$13, 000 el encuentro certero
$25, 000 los gastos para el finado gustoso


Josefina:

Con su beso amatista y seda irás al cielo
donde Dios se esconde por habernos hurtado
la buena intención de reconvenir recatada
a la inocente Josefina.
No podemos juzgarla loca cuando ha soñado
entre las nubes
la destrucción fatídica del paraíso
y la repercusión de un mundo sin Teos.
Pobre puta ardorosa
tanto la loca gime, lubrica y explota en tu humanidad
que hasta al Padre se ha enajenado con su realeza
dislocada de atalaya babel
hembra mucha, fruta peligrosa
antojo
silaba uy
ay
mmm.
$ólo de inmortales


Ana Clavel

La saliva que ella deja en tu vientre
es la saga de cuatro historias elocuentes.
Sucede en la flama de un crepúsculo
horadado por su bajo vientre
y la composición de sus montes pezonados.
Se ordeña, se hunde y se comprime
todo en el tantra de los cinco años
tiritados
por su sabor de nuca
por el sopor y su canto
por las curvas tan ufanas
y las nalgas de un desierto que se
cubre a mil zancadas.
$9, 500 la noche
$12, 000 las mil zancadas


Ameyal

Se extingue María
y se acaba el río de las flores mexicanas.
Musa azteca, rama delgada
caracol filigrana y piel morena barnizada
por el jugo de jade o los chorros de Cipactli.
Se extingue la dadora
habrá sed en el desierto
y gritaran todos los hombres
por la ausencia de tu maravilla
llamada cascada temprana
y lo que tanto das al que tu
nectar mama.
$ Por peligro de extinción la reservo a Quetzalcóatl


De momento

"A su hermano Blanquet no lo había vuelto a ver desde el accidente en la selva. Todavía soñaba con él, y con la cara de lobo de su padre. A veces, seguían corriendo los tres por la selva, con la respiración agitada, buscando un sendero diferente que desfigurase el rostro de su cruel destino. Pero siempre caía, y veía a su padre seguir la huida sin girarse siquiera una vez, o reparar en su ausencia. Al menos, siempre estaba Blanquet muriendo a su lado, desprovisto de realidad pura, tan sólo un recuerdo, y punto. Yaykobu soportaba las ganas por llorar por esos sueños malditos, o por Blanquet, a quien había traicionado en la huida, dejándolo morir a solas. Simplemente ya no podía hacerlo."

Off days: Los días del abandono
"Son dos hombres que se aman sin el límite de la gravedad: su libertad en los abismos más intensos de la pasión, los llevará, sin duda, a perderse en la levedad de sí mismos. Entonces, un día sin nada que ofrecerse a cambio, para aliviar sus vacíos alguno matará al otro. Porque su sudor y su hambruna de deseo, son pasiones desvalidas..."

Mercurio de las Voces y el Deseo